Ya están inscritos los binomios que representan a cada partido que aspira a la presidencia de la República, pero ¿acaso en estas primarias no deberían haber más binomios que representen a cada partido? ¿No es esa la esencia de las primarias? La democratización de los partidos que facilite la participación de los militantes para representar en las generales ante una eventual victoria. El partido MAS-IPSP que a través de sus dos tercios logró modificar la Ley de Organizaciones Políticas 1096 en el senado, algo fuertemente criticado por uno de los consultores para la ley como Carlos Hugo Molina, ni siquiera presenta diversidad de candidatos apostando por un solo binomio cuya participación a la postre resultará oprobiosa para la historia boliviana. Vemos que prácticamente no hay tal democratización y nuevamente se ha impuesto la batuta del líder del partido, lo cual convierte estas primarias en inútiles e injustificadas cuyo derroche económico le costará al erario n